Una hemorragia subconjuntival es muy desagradable visualmente y puede causar alarma cuando se presenta.
Aunque tienen muchas causas, tienden a actuar de la misma manera independientemente de la causa.
SINTOMAS
La mayoría de las hemorragias subconjuntivales son indoloras. Las personas tienden a notarlos cuando miran su reflejo, más comúnmente al despertar. A veces, si el sangrado es sustancial, pueden producir síntomas de cuerpo extraño.
ANATOMÍA Y FISIOLOGÍA
La pared del ojo, la esclerótica, tiene dos capas de piel superpuestas con un espacio potencial entre sí. Aunque estas dos capas de piel son muy vasculares, la apariencia blanca del ojo proviene de la esclerótica, no de la piel. Cada una de las dos capas de piel tiene su nombre. La capa más externa es la conjuntiva, mientras que la capa debajo de ella se llama Tenons. Estas capas son fisiológicamente una sola capa, pero pueden separarse entre sí en ciertas situaciones, es decir, traumatismos, hemorragias, cirugía y pterigión.
